Entre los labios
se cuela el verano
un largo beso
Lunar en tu piel
verano sobre ella
deseo al sol
Tu piel y mi piel
la noche de anoche
en nuestras manos
Entre los labios
se cuela el verano
un largo beso
Lunar en tu piel
verano sobre ella
deseo al sol
Tu piel y mi piel
la noche de anoche
en nuestras manos
LA DUCHA
Despiertas
la almohada se siente diferente
más suave
lo mismo pasa con el edredón
es muy ligero
abres los ojos y lo confirmas
no es tu habitación.
Cierras los ojos
intentas recordar la noche
el perfume
que flota en el ambiente
respiras
y las imágenes se agolpan
sonríes.
Con atención
escuchas todos los sonidos
reconoces
agua de la ducha corre
te levantas
la ropa no es un estorbo
le alcanzas.
TU PERFUME
Deseo tu perfume
en mis pupilas
cuando te acercas,
en mis oídos
cuando lo rocías,
en mi nariz
cuando me abrazas,
en mis dedos
cuando te acaricio,
en mis labios
cuando te beso
y en mi memoria
cuando cierro los ojos.
DESPERTAR
Rojo el cielo
amanece
y en minutos
dorado se torna.
Por la ventana,
tu piel ilumina
tus pezones,
áureas cerezas
la luz recortan
y el deseo
-de nuevo-
despiertan.
UNA MAÑANA EN MARRUECOS
Por la ventana
-pequeña-
se cuela el sol
y a contraluz
tu silueta
bajo la túnica,
provocadora,
recorta.
Como hipnotizados
sin pudor
ni falso recato
avanzamos,
nos acercamos
y húmedos
nuestros labios
se encuentran.
Eres a quien,
tras recorrer
ríos y desiertos,
había esperado,
te digo al oído
mientras
con embeleso
te desnudo…